En San Miguel Totolapan, confirma el Ejército
*En dos fosas localizadas en las afueras de San Antonio La Gavia, municipio de San Miguel Totolapan, se presume hay más de un centenar de cadáveres de personas ejecutadas
*El número de cadáveres se determinó mediante un detector molecular de partículas, llamado por los militares “La Güija del Diablo”.
*Los militares hicieron las primeras diligencias, pero al darse cuenta de la magnitud de problema, sacaron a la prensa y a las policías ministeriales y del estado
*La Procuraduría General de Justicia confirma que enviará peritos a la zona
*El rescate de los cadáveres podría tardar más de 5 días
SAN MIGUEL TOTOLAPAN, GRO.
Elementos del Ejército Mexicano adscritos al 27 Batallón de Infantería, con sede en la ciudad de Iguala, a través de una denuncia anónima detectaron dos fosas clandestinas, en las que presumiblemente fueron enterradas entre 50 y 100 personas que fueron secuestradas en la región de Tierra Caliente.
Durante las primeras diligencias de ayer fueron localizadas dos osamentas, pero un reporte de la Procuraduría señala que hacia las 8:00 de la noche ya habrían sido rescatados 17 cadáveres.
La estimación oficial es que una de las fosas alberga más 18 cuerpos, y otra más de 60, en lo que sería uno de los hallazgos de enterramientos clandestinos más grande en la historia reciente del país.
El hallazgo de las dos fosas clandestinas se hizo en unos predios ubicados a unos 10 kilómetros adelante de la comunidad de La Gavia, municipio de San Miguel Totolapan, al cual se introdujeron militares y personal de la Procuraduría, luego de que recibieron denuncias al respecto.
Según informes oficiales, alrededor de las 11:30 horas de este martes 1 de marzo, militares de la 27 Batallón de Infantería, dieron parte a la Agencia del Ministerio Público del Fuero Común del Distrito Judicial de Cuauhtémoc, con sede en Arcelia, de que a través de una denuncia ciudadana localizaron dos fosas clandestinas en unos predios ubicados a las afueras de la localidad de La Gavia.
Motivo por el cual, personal de la Agencia del Ministerio Público del Fuero Común, y paramédicos del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas de Arcelia, así como Policías Estatales y Ministeriales, se trasladaron a dicha localidad, en donde varios militares los esperaban en vehículos tipo Hummer oficiales, para llevarlos al lugar donde se ubicaban las fosas clandestinas.
Por información recabada ya en el lugar de los hechos, se supo que en la primera fosa clandestina, se localizaron durante las primeras diligencias dos osamentas al parecer del sexo masculino, pero por la extensión de la fosa y por investigaciones militares, se estima que podrían estar ahí más de 60 cadáveres enterrados.
En el mismo lugar se encontraron alrededor de doce pares de calcetines de diferentes modelos, así como diversas playeras, pantalones y zapatos que se cree pertenecieron a las víctimas enterradas en dicha fosa, así como cinta canela e industrial.
El número de cadáveres se determinó mediante un detector molecular de partículas, llamado por los militares “La Güija del Diablo”.
Por es motivo, los militares y personal de la Procuraduría solicitaron una máquina retro-excavadora, para avanzar en las excavaciones y ver realmente cuántos cuerpos se encuentran enterrados.
De acuerdo con información manejada en el lugar de los hechos, la primera fosa clandestina fue cerrada debido a que se llenó, por lo cual una segunda fosa clandestina fue hecha en otro predio cercano.
En esta otra, los militares recabaron informes de que es más reciente y en la cual se presume haya cuerpos todavía en estado de putrefacción, más de 18.
De las dos fosas clandestinas se logró saber que en ellas fueron enterradas varias personas que en un determinado momento fueron secuestradas en la región de Tierra Caliente, y que los secuestradores sólo cobraron el rescate, pero nunca entregaron a las víctimas. Por lo cual, la Procuraduría, a través de la Agencia del Ministerio Público, iniciará con las investigaciones y se prevé que las excavaciones se lleven a cabo durante los próximos días en ambas fosas.
Cabe mencionar que los militares se negaron a proporcionar más información a los medios de comunicación en relación a las fosas clandestinas, una vez que se percataron de la magnitud del problema. Incluso, prohibiendo la entrada de la prensa al lugar de donde se encuentra la primera fosa clandestina.
Además, se opusieron a que hubiera presencia de las corporaciones policiacas como la Policía Ministerial del Estado y la Policía del Estado, por lo cual dichas corporaciones se retiraron del lugar
Horas más tarde, alrededor de las 18:00 horas, llegaron elementos de Protección Civil Regional para apoyar con el traslado de cuerpos que fueran sacados de las fosas; sin embargo, de parte del Ministerio Público no hubo más diligencias.
Un último reporte obtenido reveló que las excavaciones continuarán durante la mañana de hoy y que el personal de la Procuraduría continuará con las diligencias y las investigaciones pertinentes en cuanto al hallazgo.
Hasta las 7:00 de la noche de este martes, sólo los restos de dos hombres fueron exhumados, los que prácticamente estaban hechos osamenta, a los que se les pudo observar cinta canela en los huesos de los pies y de las manos. Según el médico legista, tenían por lo menos un año sepultados en esa zona.
Será a primeras horas de este miércoles que se reinicien los trabajos de exhumación de cadáveres.
Según la opinión de peritos, la extracción de los cuerpos podría llevar por lo menos 5 días, de existir la cantidad detectada, ya que se hace un registro personalizado y por cada cuerpo a revisar podría llevarse hasta una hora.
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Cuatro individuos fueron ejecutados y abandonados debajo de un puente peatonal sobre la carretera federal México-Acapulco, tramo Chilpancingo-Iguala, en tanto en San Antonio la Gavia, municipio de San Miguel Totolapan, región de la Tierra Caliente, quedaron al descubierto dos fosas clandestinas, de una de las cuales habían sacado anoche cuando menos cuarenta cuerpos.
En el lugar unos campesinos descubrieron dos cuerpos semienterrados. Enterados de los hechos, elementos del Ejército se presentaron al lugar y mandaron traer retroexcavadoras y equipo de rastreo. Los militares confirmaron el descubrimiento de las tumbas clandestinas.
IGUALA, GRO.
*En los narcomensajes, hacen referencia a la emboscada de policías ministeriales
IGUALA, GRO.
Los cuerpos de cuatro hombres ejecutados fueron encontrados la madrugada de este martes en el entronque al poblado de Xalitla, Municipio de Tepecoacuilco de Trujano, sobre la carretera federal Iguala-Chilpancingo.
El hallazgo ocurrió alrededor de las 3:08 de la madrugada y el caso fue notificado al número de emergencia 066.
Al lugar arribaron elementos policiacos, peritos de la Procuraduría General de Justicia del Estado y un agente del Ministerio Público del Fuero Común.
Los cuerpos de los cuatro hombres que presentaban múltiples orificios de bala, estaban amontonados, atados de pies y manos y vendados con cinta canela, además de que encima de los cadáveres dejaron dos cartulinas con los siguientes narcomensajes: "101.7 la verga hijos de su puta madre, putos mugrosos quieren pelea, el color sigue en su gente y se los va a cargar por chaquetros, mordieron la mano que les dio de comer. La verga sigue siendo la verga. Atte. Los Rojos. Puro Guerrero."
El segundo decía: "Humberto Velázquez El Wuacho, esta va para ti también, te fuiste esta vez, si El Flaco te la perdonó yo no lo voy hacer perro desgraciado, chaquetero. Atte. ?".
A las 3:00 de la tarde del lunes pasado, cuatro elementos de la Policía Ministerial del Estado fueron murieron acribillados en una emboscada que les tendieron sujetos no identificados a la altura de la Curva del Cristo, en el tramo carretero Chilpancingo-Iguala, cuando viajaban en una camioneta de la corporación con dirección a Iguala, en la que también viajaba el coordinador en la Zona Norte de la PME, Humberto Velázquez Delgado, quien resultó herido y trasladado a una clínica para su atención médica.
Uno de los cuerpos era de un joven de entre 23 y 25 años, complexión delgada, piel morena clara, vestido con pantalón de mezclilla en color azul marino que tenía bajado hasta las rodillas, truza color gris y sin playera; el segundo cadáver era de un hombre de unos 45 años, de complexión regular, piel morena clara, que vestía pantalón color beige, cinturón oscuro y sin playera; el tercero era de una edad aproximada a los 25 años, piel morena clara, complexión regular, con bigote, tenía puesta una playera azul y pantalón de mezclilla azul marino, y el cuarto, era de un joven de unos 25 años, moreno claro, complexión regular, vestido con una playera con mangas en blanco y el centro en verde seco y pantalón de mezclilla azul.
Los cadáveres fueron trasladados al Servicio Médico Forense de Iguala, donde les practicarían la necropsia de ley y donde se encuentran en calidad de desconocidos.
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